31 de diciembre de 2013

CAPÍTULO 39: LOS CHANTAJES

Mi móvil no tardó ni un par de horas en recibir un mensaje de Santi. Por mi cabeza pasaban mil cosas, entre otras, daba por hecho que el gusto de Santi por los hombres no era algo casual, aunque imagino que debido a lo conservadora que era su familia, era algo que él no estaba dispuesto a aceptar. Recuerdo, incluso, que tiempo después de todas estas líneas que estoy escribiendo llegó a decirme: "¿tu qué preferirías: una vida solucionada con una herencia de más de 80 millones o decir que te gustan los rabos y perder todo tu futuro?". Con eso creo que queda claro lo que le pasaba a Santi.

Pero bueno, ya habrá tiempo de explicar esa historia. Aquel verano Santi quería experimentar y el elegido había sido yo: el chico con el que a los 15 años se hacía pajas y con el que había pasado una noche hacía unos días. Si yo no había querido volver a encontrarme con él era por respeto a los sentimientos de Sergio, pero la situación se hizo insostenible. Santi quería follar, le daba igual si conmigo solo o con los dos a la vez, pero quería echar un polvo con un tío y lo quería ya. "O follamos o le cuento todo a tu noviete", me llegó a decir en varias ocasiones.

Así que, con el fin de no aguantar más chantajes, se lo conté todo a Sergio. Pude ver cierta cara de decepción, aunque él no expresó ningún desacuerdo: "ni que fuéramos novios!", dijo, como para quitar hierro al asunto. "¿Qué quiere follar? Pues démosle una buena follada". Más o menos sabía que iba a aceptar, sabía que Santi le había vuelto loco y follar con él sería una caramelito difícil de quitarle. Así que le mandé un sms a Santi y quedamos al día siguiente en su casa, aprovechando que su familia había salido.
Santi nos estaba esperando sólo con unos calzoncillos suspensorios blancos, que dejaban ver su culazo y realzaban su paquete. Se notaba que se había preparado. No quería perder ni un minuto. Para saludarnos nos clavó la lengua hasta la campanilla y nos fuimos desnudando, entre sobeteos de cuerpos, quedándose Sergio en el medio, a modo de sandwich. Subimos a su habitación recogiendo las ropas que estaban en el suelo, cerramos la puerta y volvió a repetirse el sandwich entre besos, sobeteos, comidas de cuellos y manos sobando pollas.

- Vaya culazo tiene tu noviete Marquitos, se lo voy a reventar - decía Santi.

Mientras tanto, Sergio se puso de rodillas y nos empezó a chupar las pollas, a la vez que Santi me clavaba la lengua y con un dedo jugaba con mi culo. Yo aprovechaba para sobarle el torso, que me encantaba y mi polla se ponía aún más dura.
La situación estaba de lo más caliente, así que cogí a Sergio y le puse a cuatro patas en la cama para empezar a comerle el culo, mientras que Santi por el otro lado le ofrecía su polla. Sergio disfrutaba como un enano con este rol. Al poco tiempo, me traje a Santi a mi lado y con ayuda de mi mano, le enseñé a meterle los dedos a Sergio.

- Métele uno más, con cuidado, sin forzar, fóllale el culo con tres dedos - le decía.

Le sacaba los dedos a Santi y se los chupaba. Pasó a meterle cuatro dedos y Sergio soltó un gemido de placer inmenso. Fui a buscar un condón a la cartera y se lo puse a Santi:

- Clávasela, primero con cuidado, poco a poco, y luego le follas a tope - le indicaba.

Sergio no oponía resistencia. Su culo estaba dilatadísimo y la polla de Santi, que era generosa, entró sin encontrar mucha resistencia, a la vez que yo le llenaba a Sergio la boca con mi polla ahogando su gemido. Santi se la metía hasta el fondo alcanzando poco a poco buen ritmo y chocando sus huevos contra los de Sergio, lo que me estaba poniendo a mil.

- Marquitos, ven aquí... - dijo Santi. Quiero follarte, mientras tu te lo follas a él.

La situación, de pronto, se había dado la vuelta. Ahora era yo el que estaba a cuatro patas con Sergio y Santi trabajándome el culo con esmero. Sergio sabía que no estaba muy acostumbrado a hacer de pasivo, pero imagino que debido a la excitación del momento, tenía el culo dilatado. Me llegaron a meter cuatro dedos, que al principio ardían en mi culo, pasando después a un intenso placer. Y sin mucha contemplación, Santi me la metió de golpe. Sin mimo. Grité. Su polla se quedó dentro y siguiendo indicaciones de Sergio la empezó a mover poco a poco. Lo que era dolor intenso se convirtió en una especie de cosquilleo, que después, subiendo el ritmo de la follada, se transformó en placer. Cuando todo iba sobre ruedas, Sergio se acopló delante mía ofreciéndome su culo, que estaba ya bastante abierto. Mi polla entró ahí sin impedimentos. La sensación de que te estuvieran follando el culo por un lado, mientras te follabas otro culo por delante era indescriptible. Estar en el medio de dos cuerpos calientes, con dos tíos sudados y pidiéndome más me puso a mil. En el momento que llegamos a coger un ritmo común, para lo que tardamos bastante, todo hay que decirlo, no tardé ni 5 minutos en correrme dentro de Sergio, gritando de placer. Sergio, que sabía que ya me había corrido y a el no debería quedarle mucho, se dio la vuelta y me folló la boca con su polla llenándomela de leche caliente que me escurría por la barbilla, para después, y follándome como una auténtica máquina, correrse Santi dentro de mi. Como yo seguía cachondo, le quité el condón a Santi y le lamí la polla dejándosela bien limpia.

Estábamos extasiados los tres, así que nos tumbamos en la cama, para poco después, meternos a la ducha los tres y morbosear un poco más. Tengo que reconocer que es uno de los mejores polvos que había echado hasta ese momento.

Para Santi debió ser suficiente o estar por encima de sus expectativas. No ya sólo por su cara de felicidad y porque me dijera que vaya polvazo, sino porque ese verano no hubo más encuentros con él.

*****

¡Feliz 2014!

4 comentarios:

  1. La mas exquisita y definitiva solución a cualquier posible chantaje.

    Feliz año nuevo!

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  2. Un buen polvazo para acabar el año.
    Feliz 2014 !!! :-)
    Besos, lametones y pollazos a raudales.

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  3. Primero Mark quiero felicitarte por tu blog. No se muy bien como lo encontré pero empece a leer y me enganche a tu historia. Me encanta como escribes!

    Referente a este capitulo yo estoy en la misma situación familiar que Santi y tengo que decirte que es una situación muy difícil y que realmente se pasa muy mal. Estoy totalmente de acuerdo que lo que ha hecho esta muy mal pero el pobre chico dudo que con todo el chantaje disfrutara mucho. En capítulos anteriores preguntabas porque hombres casados o con novia iban a buscar sexo con hombres, pues una posible respuesta puede ser la situación de Santi o la mía.

    Te animo que continúes así con tu blog y a partir ahora ya tienes un fan mas ;)

    Saludos des de Barcelona

    Edu

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    1. ¡Bienvenido al blog Edu! Gracias por tus palabras y por la opinión que das acerca del asunto. Espero seguirte leyendo por aquí. Un saludo ;)

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